​"Taylor Swift: Más que un nombre en común"

Compartir nombre con una celebridad puede parecer algo común, pero para Taylor Swift, un hombre de 30 años que trabaja como Director de Capacidad Gubernamental en la Fundación POPVOX, esta situación ha marcado su vida de una manera inesperada.

Tenía 15 años cuando oí hablar de la cantante Taylor Swift por primera vez. 

En una reciente entrevista con Bussines Insider, Taylor compartió cómo fue crecer llevando el mismo nombre que la famosa cantante. Inicialmente pensó que no sería gran cosa, pero con el tiempo se volvió frustrante. Su apariencia física tampoco ayudaba, ya que su corte de pelo a lo Justin Bieber y sus anteojos lo hacían destacar aún más.

Sin embargo, al llegar a la universidad tomó una decisión crucial: aceptar su nombre y todo lo que implicaba. "Me dieron este nombre por una razón y voy a crecer y convertirme en quien debo ser con él", rememoró Taylor.

A pesar de las inevitables interacciones sociales relacionadas con su peculiar nombre e incluso en su carrera política, Taylor decidió abrazarlo y verlo como algo positivo. "Me gusta mi nombre y creo que me ha ayudado más que mal, incluso en el trabajo", afirmó.

Los beneficios de llamarse Taylor Swift

Taylor trabaja en un espacio de defensa del Congreso, donde se dedica a temas como mejoras salariales, beneficios laborales y tecnología. En sus propias palabras: "Ayuda tener un nombre como el mío porque la gente generalmente lo recuerda". Taylor reconoce la importancia de que su nombre esté asociado con los temas que defiende, ya que esto facilita que las personas recuerden y comprendan las causas por las que lucha.

Sin embargo, Taylor ha encontrado una forma ingeniosa de mantener cierta distancia con la famosa cantante del mismo nombre. Durante entrevistas con la prensa, solicita ser citada como Taylor J. Swift para evitar confusiones y asegurarse de que su trabajo en el Congreso no sea opacado por su homónima en el mundo del pop. De esta manera, logra enfocar la atención en sus importantes labores sin distracciones innecesarias.

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